Convento de las Madres Dominicas

  • La Solana

Descripción

Convento de las Madres Dominicas 

Fundación y primeros años

El Convento de las Madres Dominicas de La Solana, oficialmente Monasterio de San José, es un centro de clausura fundado entre 1593 y 1595 por el bachiller Juan Díaz de Sabina, clérigo de la Orden de San Juan de Malta, y su hermana Francisca González. Ambos donaron casas, rentas y propiedades en la calle Monjas, permitiendo el establecimiento de una comunidad dominica que ha permanecido activa sin interrupción desde el siglo XVI.

La fundación recibió autorización eclesiástica y real, consolidándose en 1595-1596. Las primeras religiosas procedían de conventos dominicos de la región, en plena expansión contrarreformista que reforzó la presencia de órdenes mendicantes en La Mancha.
 

Evolución y vida conventual

El convento sobrevivió a las desamortizaciones del siglo XIX y a los conflictos del XX gracias a su clausura estricta y al apoyo de la población. Mantiene prácticas tradicionales como el rezo coral, la vida en silencio y trabajos artesanales, adaptándose a las reformas del Concilio Vaticano II sin perder su identidad dominica.

Hoy continúa siendo un enclave espiritual activo, con visitas limitadas a la zona de reja y participación en celebraciones religiosas vinculadas a la Virgen de Peñarroya, patrona compartida de La Solana y Argamasilla de Alba.
 

Arquitectura y ubicación

El edificio presenta características del renacimiento popular manchego, con iglesia aneja de una nave y reformas barrocas que aportan sobriedad y equilibrio propios de la arquitectura conventual de clausura. Situado en pleno casco histórico, se integra en rutas patrimoniales del Alto Guadiana y representa uno de los conjuntos monásticos mejor preservados de la comarca.