Argamasilla de Alba
Argamasilla de Alba es mucho más que un pueblo con historia: es el corazón de una tradición literaria que ha dado la vuelta al mundo. Según la leyenda cervantina, esta localidad manchega es el verdadero “lugar de cuyo nombre no quiso acordarse” Miguel de Cervantes en el inicio de su *Don Quijote de la Mancha*. Se cuenta que fue en la Casa de Medrano donde el escritor estuvo preso y donde, inspirado por los muros de esa cueva hoy visitable, comenzó a dar forma a su inmortal obra. ¿El motivo del encarcelamiento? Tal vez un requiebro a una moza, o quizás sus intentos de recaudar impuestos del Priorato de San Juan. Lo cierto es que esta historia ha viajado de generación en generación, y sigue viva en cada rincón del pueblo.
Argamasilla de Alba forma parte esencial de la Ruta del Quijote, y ofrece al visitante una experiencia completa. Desde la emblemática Casa-Cueva de Medrano —hoy sede de la Biblioteca Municipal y la Oficina de Turismo— hasta la Iglesia de San Juan Bautista, la Casa del Bachiller Carrasco, la antigua botica de los Académicos y el Pósito de la Tercia, cada paso conecta con la historia y la literatura. Pero Argamasilla también mira al futuro con proyectos sostenibles como Luz de Alba, el primer centro ECO Óleo Turístico de España, donde podrás participar en la producción de aceite ecológico y alojarte en villas bioclimáticas. A todo esto se suman la cercanía al Parque Natural de las Lagunas de Ruidera y al embalse de Peñarroya, rutas gastronómicas, visitas a bodegas y una agenda cultural activa todo el año. Visitar Argamasilla es descubrir La Mancha más auténtica… y vivirla en primera persona.