San Carlos del Valle
rompe con la uniformidad de la llanura, enclavado en una hondonada. Lo más impresionante es el conjunto arquitectónico que forman su Plaza Mayor y la Iglesia del Santísimo Cristo del Valle, sin duda, uno de los más atractivos de la región.
La Plaza está formada por columnas toscanas que sostienen pisos y galerías de dinteles, zapatas y balaústres de madera. En principio fue ideada como atrio para el mencionado templo, que pertenece al barroco final con elementos neoclásicos. En la misma se ubica la Casa Grande de la Hospedería, construida en 1704. Fue utilizada como lugar de reposo para los viajeros y peregrinos, que puedes disfrutar en la actualidad.